Exportamos cebollas de Calidad desde Fustiñana

Cebollas Marchite se ha consolidado como un referente en la exportación de cebollas de alta calidad. Esta empresa familiar ha sabido combinar tradición y modernidad, logrando que sus productos lleguen a mercados internacionales, llevando consigo el sabor y la frescura de la agricultura española desde Fustiñana a Alemania, Holanda, Irlanda y Portugal.

Nuestra ubicación estratégica, ofrece un clima ideal y suelos fértiles, lo que permite el cultivo de cebollas con características excepcionales. Cebollas Marchite se especializa en cebolla de grano y de medio grano. Ambas se cultivan con esmero, respetando las técnicas agrícolas que han pasado de generación en generación.

Nuestro compromiso con la sostenibilidad

Una de las claves del éxito de Cebollas Marchite es su compromiso con la sostenibilidad. La empresa implementa prácticas agrícolas responsables que minimizan el impacto ambiental, utilizando técnicas de riego eficientes y métodos de cultivo que preservan la biodiversidad. Este enfoque no solo asegura la calidad de sus cebollas, sino que también responde a las crecientes demandas de los consumidores internaciones, cada vez más conscientes del medio ambiente.

El proceso de exportación es otro área donde Cebollas Marchite brilla. La empresa cuenta con una infraestructura moderna y un equipo profesional que se encarga de cada etapa, desde la cosecha hasta la distribución. La frescura del producto es fundamental, y para ello se utilizan sistemas de embalaje que mantienen la calidad durante el transporte, asegurando que las cebollas lleguen en óptimas condiciones a destinos en Europa.

Las relaciones con nuestros clientes, clave cuando exportamos

Además, Cebollas Marchite se esfuerza por establecer relaciones sólidas con sus clientes internacionales. La atención personalizada y la flexibilidad en los pedidos son aspectos que diferencian a la empresa, creando vínculos duraderos y confianza en su capacidad de suministro.

En resumen, Cebollas Marchite no solo exporta cebollas, sino que lleva consigo el esfuerzo, la tradición y el compromiso con la calidad que caracteriza a la agricultura de Fustiñana. Con cada cebolla que sale de sus instalaciones, se envía una parte del corazón de Navarra al mundo.